Durante varios meses, los Labubu han estado pegados a nuestros bolsos y dominando nuestras cremalleras. Pero el auge de estos peluches peludos con sus sonrisas traviesas está llegando a su fin. Las fashionistas ahora optan por alternativas más prácticas y menos infantiles. Están colocando dijes de belleza en sus bolsos para no tener que pasar horas buscando su maquillaje en ese abismo de tela sedosa.
¡Adiós Labubu, hola amuletos de belleza!
Los labubu, esos retoños estéticos de los peluches infantiles, han pasado de ser accesorios codiciados a reliquias del pasado en tan solo unos meses. Ayer, los labubu eran prácticamente imprescindibles en los bolsos, mientras que hoy están desterrados de nuestros armarios. Estos personajes, una mezcla de ternura y terror, que antaño se suponía que personalizaban nuestros looks y expresaban nuestra personalidad, ahora no son más que recuerdos lejanos.
Tras desatar un frenesí colectivo, los Labubu se retiran con suavidad, dando paso a un accesorio que no es nada más que un truco. Otro dije para bolso ha eclipsado al peluche con abrigo de piel, y no es solo decorativo. Se trata de los dijes de belleza: productos de belleza diminutos que parecen sacados de una novela de Lewis Carroll.
Las ilustraciones de moda ya no presentan aterradoras bolas de pelo en colores intensos, sino brillos de labios Rhode, sofisticados rubores compactos y llaveros llenos de productos para el cuidado de la piel. Todos estos son prácticos envases para retoques sin tener que rebuscar en el bolso . Estos dijes de belleza, tan pequeños que se mimetizan con los cosméticos de los catálogos de juguetes, combinan practicidad y placer.
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Los productos de belleza es mejor guardarlos fuera del bolso.
Todas sabemos que el bolso de una mujer es un verdadero tesoro. Cuando buscamos nuestro bálsamo labial, siempre encontramos el equivocado. Maldecimos nuestro bolso desordenado hasta que finalmente encontramos el artículo correcto. Este nuevo gadget de moda acaba con todas nuestras preocupaciones. Se acabó rebuscar en el bolso para retocarte el maquillaje o ajustarlo entre salidas.
Nuestros productos de belleza esenciales ahora están fácilmente accesibles desde el asa de nuestro bolso y siempre a nuestro lado. Además de adornar lo que podríamos considerar una extensión de nuestro brazo, estos charms para neceseres prometen belleza instantánea. Glamorosos, adorables, ingeniosos y con un diseño cuidado, estos productos imprescindibles de nuestros neceseres, ahora en versiones miniatura, satisfacen nuestro deseo de belleza inmediata y nuestra necesidad de individualidad. A diferencia de los Labubu, que solo estaban ahí para que los miráramos de reojo, estos charms para neceseres cumplen una función real (además de llenar el espacio de nuestros bolsos).
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Productos para labios, los nuevos adornos para bolsos
Una lima de uñas en miniatura, un iluminador oculto en un estuche dorado con clip, un rubor oculto en un dije de cobre, un producto para el cuidado de la piel colgado de una cadena decorativa. A diferencia de los antiguos amuletos de la suerte con forma de cereza, bigote o búho, los dijes para neceseres están diseñados para ser versátiles. No solo adornan un bolso y le dan personalidad; realzan nuestra imagen, en todos los sentidos.
Un producto esencial de belleza que no para de aparecer en los bolsos: el cuidado labial. Esto cobra sentido durante los meses más fríos, una temporada especialmente propensa a la piel agrietada y seca. Con el llavero Balm Dotcom de Glossier, un bálsamo con sabor a plátano y un diseño original, y el icónico Carmex, un bálsamo labial en tubo, estamos listas para afrontar el frío y mantenernos con estilo.
Con el auge de la estética kawaii, que despierta nuestra infancia, es difícil no sucumbir a estos productos de belleza en miniatura. Esta tendencia de neceseres con forma de charm confirma el dicho "todo lo pequeño es bonito". Estos pequeños detalles todo en uno sin duda son más atractivos que las pulseras de la amistad del siglo pasado. Ahora llevamos nuestros imprescindibles de belleza al hombro, ¡y es genial!
