La altura y el peso promedio varían considerablemente de un país a otro. La genética, la dieta, las condiciones de vida, el acceso a la atención médica, la historia económica: todos estos factores moldean los cuerpos a lo largo de las generaciones. ¿El resultado? Un físico considerado "típico" en una región puede parecer "anormal" en otra. Antes de sacar la calculadora, recordemos algo esencial: estas estadísticas describen una "historia colectiva", no obligaciones. No tienes nada que "ponerte al día".
Europa: Cuando la grandeza se vuelve ordinaria
En Europa del Norte y del Este, la estatura media suele ser impresionante . En países como Países Bajos, Suecia y Dinamarca, los hombres suelen superar los 1,80 m (5'11"), con un peso medio de entre 85 y 87 kg (187 y 184 lbs). Las mujeres también tienen una estatura media relativamente alta, que oscila entre 1,67 y 1,70 m (5'6" y 5'7"). En algunas zonas de los Balcanes, la estatura media masculina es incluso mayor. Estas cifras se deben a una dieta variada, una buena atención médica y una relativa estabilidad económica. Nota: ser más bajo o más delgado en estos países no te hace invisible ni "fuera de lugar". Simplemente eres... tú.
Asia: siluetas más compactas, igual de válidas
En varias regiones del sur y sudeste asiático, la estatura promedio es más modesta. Los hombres suelen medir entre 1,60 y 1,65 metros, mientras que las mujeres oscilan entre 1,50 y 1,57 metros. Estas diferencias se deben tanto a la herencia genética como a las condiciones nutricionales previas. Estos tipos de cuerpo están perfectamente adaptados a su entorno y cultura. Ser más bajo no significa ser más débil ni estar en peor forma física. El cuerpo humano existe en miles de variaciones, y ninguna de ellas es un error.
Las Américas: La Gran División
El continente americano ilustra a la perfección la diversidad corporal. En Latinoamérica, la estatura promedio se acerca más a la observada en el Sudeste Asiático, mientras que en Estados Unidos, el peso y la estatura promedio son mayores. Esta diferencia se explica por hábitos alimenticios más ricos y, en ocasiones, por un estilo de vida más sedentario. De nuevo, estas cifras reflejan una historia colectiva, no individual. Tu cuerpo no es una gráfica y no tiene por qué ajustarse a un promedio nacional.
África y Oceanía: una diversidad impresionante
En África subsahariana, los promedios se sitúan en un rango intermedio, con variaciones significativas según la región y el grupo étnico. En Oceanía, especialmente en Australia, los estándares se acercan más a los de Europa Occidental. Estas diferencias ponen de relieve un punto crucial: no existe un estándar universal, solo diferentes contextos.
¿Qué significa estar “dentro de la norma”?
Seamos claros: nada. Estas estadísticas son interesantes para comprender el mundo, no para juzgar a las personas. No tienes la obligación de conformarte con un promedio, ya sea local o internacional. Alto, bajo, delgado, con curvas, esbelto (etc.): todo es válido. Tu cuerpo no es un problema que se pueda solucionar, sino un espacio que se puede habitar con amabilidad.
En última instancia, ser "normal" en París, Tokio o Buenos Aires no influye en tu valor. Ya eres suficiente tal como eres. Los números van y vienen, los cuerpos viven. Y eso está perfectamente bien.
