Habían desaparecido de nuestros neceseres desde los años 2000, y ahora han vuelto a ser el centro de nuestros rituales de belleza. La purpurina vuelve a cubrir nuestros cuerpos e iluminar nuestras siluetas. Reliquia de fiestas pasadas y de nuestras primeras salidas adolescentes, la purpurina es a la belleza lo que la sal a la cocina: un condimento brillante para la piel.
Brillantina corporal, el renacimiento
Las reinas del R&B y las divas del pop se bañaban en oro para grabar videos musicales en la década del 2000. No se cortaron con los aerosoles brillantes, revelando cuerpos que parecían joyas vivientes. De hecho, estos frascos iridiscentes eran un símbolo de pertenencia, una firma colectiva. Si creciste en la era de los jeans de tiro bajo, los collares elásticos y las cámaras desechables, sin duda usaste y abusaste de la brillantina. Aplicada casi religiosamente bajo vestidos sin espalda o camisolas coloridas, la brillantina era prácticamente un requisito en cualquier fiesta. Adornaba la piel con una hermosa capa de luz.
Este frasquito, que solía adornarnos el cuerpo y acompañar nuestro perfume Lolita Lempicka y nuestros brillos labiales con sabor, era indispensable en ocasiones especiales. Poco a poco, la purpurina se volvió barata y anticuada. Desapareció de nuestros neceseres y clavículas, dando paso a los iluminadores en polvo. Pero, como es habitual, el mundo de la belleza disfruta desempolvando tendencias olvidadas y haciendo que productos que antes se consideraban soporíferos parezcan indispensables.
La purpurina vuelve a caer en cascada desde el cuello hasta los brazos, aportando a quienes la lucen un toque extra de glamour y un atractivo natural. Estrellas como Rita Ora y Tyla se suman a esta deslumbrante estética Y2K . En refrescantes tonos escarchados o rosados de aspecto saludable, la purpurina proporciona un acabado sofisticado a la piel. Es suficiente por sí sola para iluminar la tez, estilizar la figura y acentuar los rasgos corporales clave.
Un remedio brillante para la confianza
Además de perfeccionar la apariencia y transformar el cuerpo en una gigantesca bola de discoteca, la purpurina también es la base de la autoestima. Es un acto estético, sin duda, pero también una celebración de uno mismo. La aplicación en sí misma es nada menos que autoplacer. Cada mano que se posa sobre el cuerpo se convierte en una caricia tierna e incandescente.
La purpurina realza partes de tu cuerpo que evitas en el espejo, actuando como un adorno. Te permite ver belleza donde solo ves defectos. No posee poderes mágicos, pero tiene el mérito de hacerte sentir visible e iluminar lo que siempre intentas ocultar. Dorada, plateada o nude, la purpurina va más allá de la superficie.
Ver esta publicación en Instagram
Ver esta publicación en Instagram
Una idea brillante para ocasiones especiales.
Durante mucho tiempo, practicamos la moderación y dejamos que Hailey Bieber y otras "chicas limpias" tomaran el control de nuestras rutinas de belleza. Si bien en la década del 2000 buscábamos fácilmente maquillaje opulento y ojos dramáticos en Tumblr, es evidente que ahora el minimalismo está más de moda que el desenfreno creativo. Por suerte, los tiempos cambian y las tendencias evolucionan. Lo que ayer estaba prohibido, hoy está prohibido.
Mientras que los brillos de ojos cremosos, el kohl negro y las sombras de ojos pop están de vuelta gracias al maximalismo, el brillo también tiene un futuro brillante por delante. Cruza el umbral del cuello para transformar el cuerpo en un lienzo artístico y un campo de admiración. Ya no se limita al párpado y al arco de la ceja, sino que desafía esta regla de moderación. El brillo es el brillo que falta en nuestros armarios. Gracias a él, un sencillo vestido negro puede convertirse en un icono. Es el detalle que marca la diferencia, el ingrediente festivo por excelencia.
Y las adictas a la belleza recomiendan la purpurina en gel para un acabado luminoso pero sin exagerar. Atrás quedaron los días de la purpurina en polvo que nos hacía estornudar cada vez que la aplicábamos. ¿Necesitas una referencia? Body Lava de Fenty o el famoso aceite multiusos Huile Prodigieuse Gold.
Para el nuevo año, las estrellas abandonan el cielo brumoso para posarse en la base del escote y sobre la piel expuesta. 2026 probablemente será el año de infinitas posibilidades de belleza.
